El escenario elegido fue el templo de los masones de la calle Perón al 1200. Allí, el juez de la Corte Suprema, Eugenio Zaffaroni se apartó por un momento del debate por la resolución de la Ley de Medios y disertó frente a los “hermanos y hermanas” de la logia sobre la Justicia en la Argentina,criticó con dureza el sistema presidencialista, advirtió sobre la parálisis del Consejo de la Magistratura e insistió con la necesidad de reformar la Constitución.
Sin embargo, con resignación, Zaffaroni reconoció que la reforma quedará para el futuro porque en el presente los dirigentes políticos “se están peleando por 2015 y se prueban la banda presidencial”.
El magistrado se mostró a favor de la creación de un Tribunal Constitucional que asuma parte de las funciones que actualmente tiene la Corte Sumprema. “No hacemos derecho de fondo, estamos haciendo un derecho de cautelares”, sentenció.
La disertación estuvo rodeada por los rituales de la Gran Logia de la Masonería Argentina.Por momentos, Zaffaroni mostró su sorpresa frente a algunos tramos de la ceremonia, encabezada por el gran maestre, Angel Jorge Clavero, máxima autoridad de la logia.
Sistemas políticos. “No estoy seguro de nada, reflexiono, alejado de la coyuntura de la política nacional”, comenzó su exposición el juez, y tras un breve recorrido histórico consideró que “el sistema presidencialista está agotado en el mundo; tarde o temprano, ante alguna crisis o reforma constitucional, nosotros deberemos implementar el parlamentarismo, porque es un sistema más transparente y justo”.
“Esto en Argentina suena raro, no niego que haya personas con carisma y personalidad para enfrentar un sistema presidencialista, pero lo que natura no da Constitución no crea”, dijo Zaffaronni.
“La política es el arte de negociar. En un sistema parlamentario, las negociaciones se hacen arriba de la mesa ante el Parlamento, lo que genera transparencia, no como en el sistema presidencialista, que se hace todo a escondidas y huele a espurio”, sentenció.
Parálisis. En el silencio del salón principal del templo, que comenzó a construirse en 1872, Zaffaroni trazó un diagnóstico crítico de diferentes ámbitos de la Justicia y propuso reformar la Corte Suprema. Sobre el Consejo de la Magistratura, el organismo encargado de nombrar y sancionar a los jueces, dijo que “no funciona, está paralizado”. “No podemos nombrar jueces ni removerlos ante inconductas”, agregó.
Otro tramo de la exposición apuntó hacia la misma Corte Suprema. “Hoy casi no tenemos un control de constitucionalidad”, dijo y avaló la creación de un tribunal constitucional, que asuma ese rol.
“En nuestro caso –dijo Zaffaroni en referencia a los miembros de la Corte–, cada uno es responsable del control de constitucionalidad pero tenemos que votar en todas las materias y no hay un Leonardo Da Vinci del derecho, la enorme extensión que tiene la materia en este momento no lo permite. Es inevitable no saber todo, el que dice algo así es un soberbio que está mintiendo”, enfatizó. A renglón seguido, reafirmó su convicción sobre la necesidad de una reforma constitucional.
“En nuestro caso –dijo Zaffaroni en referencia a los miembros de la Corte–, cada uno es responsable del control de constitucionalidad pero tenemos que votar en todas las materias y no hay un Leonardo Da Vinci del derecho, la enorme extensión que tiene la materia en este momento no lo permite. Es inevitable no saber todo, el que dice algo así es un soberbio que está mintiendo”, enfatizó. A renglón seguido, reafirmó su convicción sobre la necesidad de una reforma constitucional.
“Esto surgirá en los próximos años, por ahora no avecino una reforma constitucional, porque a partir de ahora empezarán a pelearse por 2015 y ya se están probando la banda presidencial, así que no creo que se plantee una reforma porque van a decir: ahora que me toca a mí, no van a reformar”, dijo Zaffaroni, con ironía. En la Corte Suprema, mientras tanto, sus colegas lo esperan para definir el largo debate por la Ley de Medios.
Fuente: Agencias.