El secuestro y ejecución en Durango del reportero Eliseo Barrón Hernández, fue condenado como un grave y preocupante acto de barbarie en contra de los mexicanos, la democracia y la libertad de expresión en el país, por el Muy Respetable Gran maestro de la Gran Logia El Potosí, Israel Hernández Arriga.
Se trata de actos de intimidación en contra de quienes ejercen el periodismo y la libertad de expresión, por parte de grupos delictivos, lo que constituye además de delitos, un agravio a toda la sociedad mexicana, dijo el dirigente estatal de los masones.
Dijo que debe evitarse la impunidad en este y los otros 14 asesinatos cometidos durante los últimos 12 meses en contra de periodistas en México, la que amenaza convertirse como consecuencia del narcotráfico en una de las actividades profesionales de mas alto riesgo.
Exhortó a los gobiernos federal, y de ese Estado relativamente cercano al nuestro, que demuestren una mayor voluntad política para que se frenen la violencia y la impunidad en estos ataques.
Como sabe la opinión pública, Barrón Hernández sufrió la incursión en su domicilio particular la tarde del pasado lunes, de un comando armado que frente a su esposa y dos hijos menores, lo golpeó y secuestró en la ciudad de Gómez Palacio, Durango, para aparecer en el ejido Eureka horas después, muerto con evidencias de tortura y varios disparos de armas de fuego.
Reportero de la fuente policíaca, cubrió y publicó noticias sobre la complicidad de policías y narcotraficantes en municipios de la región de La Laguna , entre otras informaciones que aludían la actividad de los narcotraficantes.
Es el segundo reportero ejecutado en el estado de Durango en menos de un mes. El 3 de mayo otro comando armado mató a Carlos Ortega, quien trabajaba para el periódico El Tiempo. En tanto que en febrero de este mismo año fueron asesinados los periodistas Luis Daniel Méndez Hernández, en Veracruz, y Jean Paul Ibarra Ramírez, en Guerrero.
-- Fraternalmente,
-Javier Rodriguez Rodriguez
Presidente de la Gran Comision de
Comunicación Social
DVM QVOD NOS IVNGIT NOS IVNGAT, NIHIL IMPOSSIBILIS ERIT