Para ellos las modificaciones que ya aprobó la Cámara de Diputados, y está en espera de la ratificación en el Senado, porque la consideraron innecesaria ya que están plenamente garantizada la libertad de culto.
“Y sí queremos denunciar por otra parte que esta reforma es una exigencia del clero católico en su pretensión de recuperar una serie de privilegios y de ventajas que ya tanto el Constituyente del 17 y aún las reformas de 1992 habían sometido a la regulación propia de la Legislación mexicana”, aseveró Jesús López Lobato del Foro Intereclesiástico Mexicano.
Agregó que le dicen no a la reforma porque es una Ley “liberticida” que borra del texto constitucional la libertad de cultos, la educación laica y la libertad de creencias.
“Pero lo más grave es que con esta pretensión se estaría desmantelando el carácter laico del Estado, ya que el mismo apartado de considerando de la Comisión de Puntos Constitucionales que aprueban la Cámara de Diputados con una votación de 199 legisladores, dice que sería necesario revisar los artículos tercero, quinto, 27, 130, la Ley de Asociaciones de Culto Público y su Reglamento”, detalló.
Añadió que este articulado sostiene el principio histórico de la separación de la Iglesia del Estado, por ello consideraron que el objetivo de la Iglesia Católica es que retiren las restricciones que la Ley impone y por ello podrían inmiscuirse en la educación pública, y otro tipo de políticas de estado.
Además manifestaron su rechazo Aidé García, Católicas por el Derecho de Decidir; Felipe Cuitláhuac Martínez Alcántara de la Gran Logia de Monterrey; Mario Isaías Castañeda Foro Cívico México Laico; y Neftalí Álvarez Pérez, República Laica.
En su lugar pidieron que se apruebe una reforma al artículo 40 de la Constitución para definir, de una vez por todas, el carácter laico del Estado.
Fuente: El Porvenir.
