Fundadores de Mariano Arista

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lunes, 29 de diciembre de 2014

II Simposio sobre “Masonería y Cristianismo”



Hoy escribe Antonio Piñero

Hace un par de semanas que volví de Tarragona después de asistir a un interesantísimo encuentro en el que se discutió largo y tendido sobre el tema que expresa el título de esta postal. Nos reunimos, en la Hospedería externa del más que impresionante Monasterio de Poblet, una cincuentena escasa de personas entre las que había clérigos, católicos, masones de las cuatro provincias catalanas y algunos de fuera, como el Gran Maestre de la Logia de Valencia, Oscar de Alfonso, y unos cuantos invitados. Entre ellos me encontraba yo, porque los invitados o bien han escrito mucho (y bien ) sobre la masonería, como el jesuita José Antonio Ferrer Benimeli, o porque tocamos temas que interesan mucho a los masones, como la Cábala ( Mario Sabán), o el cristianismo primitivo (yo mismo) o temas de masonería y sociedad (como Manuel Millán Mestres, político, uno de los fundadores del PP, y en la actualidad consejero de empresas y periodista). Asistió también el Sr. D. Enric Vendrell, de Unió, que es Director General de Asuntos Religiosos de la Generalitat catalana. Noté que había pocas mujeres. Y solo participó una.

Debo confesar que --como lego en absoluto en asuntos masónicos y con solo la cultura superficial de haber leído cosas sobre la masonería, pero sin profundizar y sin orden ni concierto—la primera vez que tuve contacto con los masones, en Madrid, quedé absolutamente impresionado por el espíritu de fraternidad que se respiraba en la Gran Logia Simbólica de España, sede de Madrid. Fue con ocasión de una conferencia que impartí por invitación de Javier Escalada, Gran Maestre de la Logia de Madrid, acerca de los “Cristianismos primitivos, con especial hincapié en los gnósticos y su pretensiones de conocimiento de lo oculto”.

Fue un auténtico impacto observarlos, mientras estuve en el interior y esperaba a que llegara la hora de impartir la conferencia. Pensé para mis adentros que esa gente que veía en la gran entrada o vestíbulo-recibidor y por los pasillos de la logia, que se saludaban con una efusión y un afecto en nada blandengue pero súper sincero, eran gentes que estaban de verdad cumpliendo el viejo mandato cristiano de “Amaos los unos a los otros”, expresado a la perfección por el Jesús del Evangelio de Juan. He comentado varias veces esta notable impresión. Y a la vez tuve un segundo pensamiento: ¿De dónde habría sacado Franco aquel viejo lema de la “conspiración judeo-masónica” contra España? Conozco muchísimos judíos y soy muy amigo de algunos de ellos, y jamás encontré ningún enemigo de España, sino todo lo contrario. Y respecto a los masones, al menos los que yo conozco ahora, pienso retrospectivamente lo mismo. Le hizo gracia a Javier Escalada el comentario que le hice: “Desde luego, al menos los masones de ahora sois tan inofensivos como un catedrático de universidad jubilado”. Y me imagino que en tiempos de Franco –y antes-- sería lo mismo.

Y ahora paso a hacerle partícipes de algunas de las muchas ideas que se lanzaron al aire en este estupendo encuentro.

Se discutió si la masonería es una religión. Ciertamente no lo es. Pero también se estuvo de acuerdo que en algunos aspectos y para ciertas personas vagamente teístas puede funcionar una religión. La filosofía en el mundo antiguo de Grecia y Roma no era ciertamente una religión pero funcionaba como tal.

Como respuesta puede valer lo que se dijo en otra ocasión: “Aportamos al individuo un enfoque distinto de ver la vida, más abierta, librepensadora, sin concentrarse en lo material. Siempre con el respeto a los demás por delante. Sólo con la cultura y el criterio suficiente se pueden ejercer las libertades”. Así explica en Gran Maestro Provincial de Castilla, el Respetable Hermano Adolfo Zabala, la razón de ser de la Masonería, en una entrevista publicada por el diario El Correo."¿Qué es exactamente la masonería?", pregunta el diario. "No es una religión ni un partido político. Es una forma de vida, un modo filosófico de ver el mundo actual. Nuestros valores se basan en la libertad, la igualdad y la fraternidad", explica el Gran Maestro Provincial.
Por mi parte recomendaría la lectura del Preámbulo (que está en Internet) de la Constitución que rige la Gran Logia Simbólica de España. Cuando en el simposio la leyó el Secretario de Comunicación en voz alta, me impresionó vivamente.

Manuel Millán Mestres, que no es masón, tuvo una interesante ponencia enfocada en sí a cualquier ciudadano responsable, que se interese por la política de su país y en la posibilidad de contribuir con su esfuerzo y sus ideas a la mejora de la situación actual de nuestro país que calificó de desastrosa. Respecto a los masones allí presentes insistió en una idea --que recalcó en una intervención posterior— de la necesidad de formar líderes en la sociedad que sepan transmitir ideas razonables y que puedan impulsar en la medida de sus posibilidades las necesarias reformas.
Millán describió la situación social de España con los siguientes rasgos, o apuntes:
• Existencia de una izquierda revolucionara, por un lado, y de un nacionalismo, por otro, que ha cambiado el sentido a las palabras, que utiliza el vocabulario a su antojo, por ejemplo, qué es democracia, qué es la Ley, y que pervierte, por tanto, la posibilidad normal de entenderse entre adversarios ideológicos civilizados.

• Confusión política por la radicalización de izquierdas y derechas

• Corrupción política, como reflejo de la corrupción general. Una partitocracia exagerada lleva a la falta de transparencia y al quebranto de la legalidad.

• Decadencia de un sistema de valores, entre ellas los del capitalismo (el que tenemos ahora es un capitalismo sin leyes). El capitalismo exagerado actual da origen a un excesivo de revoluciones sociales: que en la actualidad son unas 38. Y son revoluciones en marcha con notable impacto. El sistema capitalista debe renovar, por ejemplo, la ética ciudadana. Se debe insistir en los derechos y deberes: hay derecho al crédito, pero hay también obligación estricta de pagarlo. Todo deudor al estado debe pagar. No se pueden condonar las deudas a los defraudadores.

• Desbordamiento del ser humano por parte de un exceso de información incontrolada, no verificada. Exposición, por ejemplo, de los niños, y otros en general, a cinco o seis horas de TV diaria en donde aparecen una media de 8/10 asesinatos y otro número igualmente notable de actos de violencia sexual.

• Falta de comunicación entre las generaciones

• Enorme complejidad de la sociedad actual y falta de profesionales competentes que sepan dirigirla correctamente.

• Pérdida de la esperanza en general: sensación de que el futuro será malo.

• La salida de la crisis económica actual es dudosa, pues no hay compensación entre el número de la gente que está en paro y la tendencia actual a robotizar y mecanizar la vida de modo que la mano de obra sea expletiva. La industria que construye esa robótica no absorbe la mano de obra excedente. La falta de conciencia de la sociedad y de los políticos respecto al derecho al trabajo de todos los humanos es muy notable.

Millán propuso como solución el convencimiento y puesta en práctica de la noción del “derecho a la parte alícuota del trabajo”. Un ejemplo: si todos los que tiene trabajo cedieran una o dos horas al día de su trabajo para que esa porción fuera ocupada por otros, se acabaría en gran parte el paro. Señaló además, la falta de una educación política general por parte del estado que por medio de la TV y radios está fomentando la trivialidad y la ligereza o levedad de mente.

• Injusticia estructural de la sociedad: el 1% de la humanidad acumula casi el 80% de la riqueza. En concreto el globalismo conduce a un neo feudalismo Necesidad también de controlar la emigración de una manera razonable, pues contribuye al reparto de la riqueza.
Terminó con la idea de que España tiene ahora dos problemas: Cataluña y “Podemos”. Respecto a la primera, Millán puso de relieve el sentimiento de injusticia y vulneración de sus derechos y sentimiento nacional que hay en Cataluña y cómo el resto de España no acaba de entender lo que ahí pasa. Optó por la apoyar remedios para paliar la necesidad de aclarar cuanto antes todos los malentendidos y poner solución por medio de pactos.

En cuanto a “Podemos”: alabó su presencia en cuanto que es un reflejo de la necesidad de eliminar la suciedad que existe en la sociedad, que este “partido” pretende “barrer”, y admitió que ha brotado como una exigencia de limpieza necesaria. Pero presentó su ideología como un problema, pues no puede ofrecer una solución razonable a los problemas reales.

Seguiremos, porque surgieron suficientes ideas interesantes en este simposio, y trataremos de manera específica la cuestión de masonería y cristianismo.

Saludos cordiales de Antonio Piñero
Universidad Complutense de Madrid