La masonería femenina, la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres y la tradición frente a la modernidad a finales del siglo XIX y principios del XX son algunos de los principales temas que componen Tiempo de arena , la nueva novela histórica de la escritora y poetisa extremeña Inma Chacón, con la que consiguió ser finalista del Premio Planeta 2011. Ayer visitó la feria del libro cacereña para mostrar los entresijos de su historia ante más de un centenar de personas, que abarrotaron la carpa de autores del paseo de Cánovas.
"Me encanta volver a Extremadura, ver a los extremeños y escuchar de nuevo ese acento que tanto admiro", dijo nada más comenzar su intervención, en la que explicó algunos de los secretos de Tiempo de arena . Algunos de los críticos la definen como una novela feminista, Chacón prefiere describirla como "un homenaje a las mujeres que lucharon por la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres".
Se trata de una historia de intriga. Comienza cuando una de las protagonistas, María Francisca, clama por sus hijos, que nadie sabe que existen, en su lecho de muerte. Su madre, una mujer conservadora, niega la existencia de esos niños y dice que su hija está delirando, para evitar la vergüenza y el qué dirán. Sin embargo, sus tías la creen y comienzan la búsqueda de sus hijos. A partir de ahí, en la novela surge un segundo plano narrativo a través del que la autora teje la historia de estas tres mujeres, que acaban de regresar a España, procedentes de Filipinas (son las protagonistas de su anterior novela Filipinianas ). Aquí se encuentran un país sumido en una gran crisis, donde se empieza a hablar de la necesidad de regeneración.
DESIGUALDADES "Muchas de las que estamos aquí hemos vivido que para poder trabajar teníamos que tener el permiso de nuestro marido porque no éramos mujeres libres. Hoy, cien años después, hay igualdad desde el punto de vista civil, pero no tenemos las mismas oportunidades", sentenció Inma Chacón, que invitó a todos a leer su novela "construida de recuerdos" y, según la autora, "otra forma de contar el tiempo".
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