Camagüey, 12 may. Representantes de la Gran Logia de Cuba y de la Orden Caballero de la Luz en la provincia de Camagüey, homenajearon en esta ciudad a la figura de Ignacio Agramonte, a 139 años de su caída en combate.
En peregrinación desde el Sagrario Patrio, cenotafio en la necrópolis de Camagüey que rememora el lugar donde se supone fue incinerado el cadáver del prócer, el grupo se dirigió hasta el Parque Agramonte, antigua Plaza de Armas, donde se encuentra la estatua ecuestre del héroe.
Tras depositar una ofrenda floral en el monumento, Karel Pérez, historiador de la Orden Caballero de la Luz en la zona oriental del país, refirió que el Mayor General Ignacio Agramonte constituye un ejemplo de valentía, dignidad, moral y justicia, digno de imitar.
Miembros de las logias de todo el país organizan sistemáticamente tributos a patriotas cubanos de las gestas independentistas contra el colonialismo español, como José Martí, Antonio Maceo, Carlos Manuel de Céspedes, el propio Agramonte, y otros que pertenecieron a esas instituciones fraternales.
También protagonizan actos de recordación en sitios históricos donde ocurrieron hechos trascendentes por la libertad de Cuba.
Ignacio Agramonte fue uno de los jefes más importantes de la Guerra de los Diez Años, iniciada en 1868, y destacó como uno de los artífices de la Constitución de Guáimaro, la primera de la República de Cuba en Armas, aprobada en 1869 en Camagüey.
Su capacidad como estratega militar para organizar la caballería, la logística, las acciones combativas, y las condiciones de vida en la manigua, con escuelas, talleres y hospitales de campaña, fue reconocida por el Mayor General Máximo Gómez, cuando asumió el mando de la División de Camagüey, luego de la muerte de Agramonte.
Fuente: AIN
